La investigadora del CENIEH Davinia Moreno forma parte del equipo científico que ha publicado en la revista Quaternaire sendos trabajos sobre este yacimiento francés que ha proporcionado industria lítica achelense datada en 650.000 años
Un equipo francés de científicos del que forma parte Davinia Moreno, geocronóloga del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) ha publicado en la revista Quaternaire dos artículos sobre el yacimiento francés de La Noira, datado en 650.000 años mediante Resonancia Paramagnética Electrónica (ESR), que constituye una prueba de la presencia de la cultura achelense más antigua del Noroeste de Europa.
La Noira, se ha datado en 650.000 años mediante Resonancia Paramagnética Electrónica
Estas dos publicaciones presentan los resultados obtenidos de más de una década de estudios dedicados a este yacimiento situado en el Centro de Francia, desde un punto de vista sedimentológico, geoarqueológico y geocronológico, enmarcado en el proyecto de investigación Los primeros poblamientos prehistóricos en las formaciones aluviales de la cuenca del Loira.
Este proyecto que comenzó en 2003, apoyado por el Ministerio de Cultura Francés, el Departamento de Prehistoria del Museum National d’Histoire Naturelle de París y el Gobierno Regional del Valle del Loira, ha permitido elaborar un marco geológico, cronológico, arqueológico y paleoambiental del sistema fluvial del río Cher y de los yacimientos prehistóricos asociados, que se recoge en estos dos artículos.
Grandes bifaces
El sistema fluvial del río Cher, que recorre el Centro de Francia, está formado por varias terrazas fluviales las cuales han sido datadas por ESR entre 1 millón (las terrazas más antiguas) y 60.000 años (las terrazas más jóvenes). El yacimiento de La Noira se encuentra en una de estas terrazas y es conocido por su industria achelense con bifaces de gran tamaño.
Los estudios geoarqueológicos han demostrado que los homínidos recogían placas de roca silícea lacustre que no estaban alteradas por procesos de gelifracción, es decir, no estaban fragmentadas por la congelación y el deshielo del agua contenida en sus poros y grietas, y posteriormente las utilizaban para fabricar bifaces.
Las excavaciones arqueológicas han confirmado que La Noira es un yacimiento en posición primaria, ya que se trata de una zona de aprovisionamiento de materias primas y de fabricación de herramientas líticas. “El descubrimiento de otros yacimientos en posición primaria en la misma región parece indicar que este tipo de ocupación se ha repetido a lo largo del tiempo”, afirma Davinia Moreno.