El CENIEH celebró ayer su cuarta Noche de los Investigadores que reunió a más de medio millar de visitantes en sus instalaciones durante en una velada, que duró hasta la medianoche, llena actividades encaminadas a acercar la figura del científico y su trabajo a un público infantil, juvenil y adulto.

Las 12 ciudades con Girona a la cabeza, que han celebrado de forma conjunta este evento bajo el lema “Personas para un futuro mejor”, han apostado por volver a organizar las actividades más populares de las pasadas ediciones, “para conseguir que la de 2013 sea la Noche de todas las Noches”, explica Chitina Moreno-Torres, responsable en el CENIEH de este proyecto de la Unión Europea que tiene lugar al mismo tiempo en más de 300 ciudades de Europa.

El director del CENIEH, Alfredo Pérez-González, inauguró el evento con una conferencia titulada “El CENIEH a la vanguardia de la Evolución Humana y de la Geología del Cuaternario”, la primera de las seis que se impartierom en el Salón de Actos. Se trata de una sesión continua de conferencias que permitieron a los asistentes departir con los investigadores sobre temas tan diferentes como los glaciares y el clima en España, el karst en el sistema Ibérico, los retos de la comunicación de la Ciencia, la ilustración científica o la percepción del tiempo geológico.

Talleres
Los talleres siempre han sido el plato fuerte de la Noche, y uno de los que más éxito ha tenido entre el público infantil es el taller del “Ratón Pérez antecessor”, creado por el Grupo de Antropología Dental del CENIEH en honor del Mimomys savini, un roedor encontrado en el nivel TD6 del yacimiento de la Gran Dolina en Atapuerca, cuyo objetivo es la divulgación sencilla y didáctica de conocimientos sobre anatomía dental tanto de humanos modernos como en homínidos fósiles, y está dirigido a niños de cinco a ocho años.

También han tenido una gran acogida como en pasadas ediciones entre el público de todas las edades el taller de “Energía Invisible” en el que se pueden descubrir los misterios del magnetismo terrestre, y la llamada “Cueva de la Luz” donde en plena oscuridad brillan minerales gracias a sus propiedades fluorescentes y fosforescentes.

Pero la actividad reina ha vuelto a ser la visita a los laboratorios donde se recepcionan los materiales abióticos que llegan al CENIEH procedentes de cuevas y excavaciones, y se preparan para su estudio y análisis, que este año ha tenido el sugerente título de “Un paseo en el Delorean”.

Un clásico de esta velada cientifica es el concurso “Dibuja una científica o un científico”. Alrededor de un centenar de niños entre 5 y 12 años han participado dibujando su investigadora o invesitador para conseguir uno de los muchos premios que se entregarán, como en años precedentes, durante la celebración de la Semana de la Ciencia.

 Este evento ha sido cofinanciado por el VIIPM de la Unión Europea y la FECYT.